En invierno son muchos los problemas que podemos sufrir
en nuestra piel:
- Labios secos y escamados
- Manos y uñas maltratadas
- Sequedad en el rostro
- Descamación
- Manos y uñas maltratadas
- Sequedad en el rostro
- Descamación
La epidermis posee un hidrolipídico que la resguarda y
éste durante las temporadas Frias necesita una protección especial ya que son
muchos los factores externos que lo perjudican y desgastan.
Entre los
agresores de la piel en invierno encontramos:
- La calefacción
- El frio
- El viento
- Los radicales libres
- Los cambios bruscos de temperatura
- El alcohol y
- El tabaco.
- El frio
- El viento
- Los radicales libres
- Los cambios bruscos de temperatura
- El alcohol y
- El tabaco.
Mediante la temporada de invierno es muy importante
hidratar la piel ya que los agresores arriba mencionados le producen a la piel
tirantez y arrugas.
La capa cornea al encontrarse desprotegida se fisura, se
descama y deja evaporar más agua de la que debiera. Por eso es importante
humectar la piel y el cuerpo a diario.
La piel sufre trastornos debido al entorno que respira
por eso es indispensable utilizar cremas protectoras con antioxidantes todos
los días y exfoliarse la piel una o dos veces por semana, con esto ayudará a
desintoxicar la dermis.
El tónico es el segundo paso para cuidar la piel. Los
tónicos naturales, con una porción muy baja de alcohol ayudan a minimizar los
poros y a que estos no se llenen de tantas impurezas producidas por los
radicales libres.
El contorno de los ojos y los labios necesita una atención
muy especial puesto que es el área más delgada y frágil que tenemos.
El frio altera la película que protege esta área de los
ojos y labios y provoca una disminución del riego sanguíneo.
Si esta área de contorno de los ojos y labios no se cuida
podrían aparecer en poco tiempo las llamadas arrugas prematuras.
Para evitarlo es necesario aplicar una crema
especialmente para el contorno de ojos y labios, aplicarlo preferiblemente 2
veces al día, al levantarse y antes de acostarse.
Las Manos: En la época de invierno es cuando más se
notan las manos agrietadas, resecas y tirantes a causa del frio del invierno.
Las manos ásperas y las uñas quebradizas son los síntomas más visibles.
Veamos cómo
podemos evitar la resequedad de las manos:
- Protéjase las
manos con guantes cada vez que se exponga al frio
- Aplíquese
cremas, loción o aceite humectante después de lavarlas, si es necesario varias
veces al día
- Exfoliar las manos una o dos veces por semana y
humectarla después.
- Es
imprescindible que se aplique cada noche una crema o mascarilla que nutra y
repare la piel, ya que al igual que en la cara, en horas de la noche es cuando
las células se regeneran y están más receptivas a los tratamientos.
- En cuanto a las uñas es recomendable mantenerlas pintadas
y arregladas ya que el arreglo de las uñas o manicura ayuda a protegerlas.
Si las cutículas están muy secas es recomendable
aplicarles un aceite nutritivo o una crema especial todas las noches.
Todos estos consejos son muy recomendables llevarlos a la
práctica ya que nos vienen muy bien, la piel necesita suma atención e
hidratación sobre todo en invierno y así podrás evitar las resequedades y
descamaciones que tantos daños nos causan.
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